¿Sabías que el tren bala ya está en Uruguay?

El tren bala llego a Uruguay

Una reflexión sobre el tren bala que tenemos en Uruguay

@danielinnmentor

Una de las cosas que más me gusta preguntar en mis talleres es cuál es la característica que tienen los países más desarrollados del planeta. Me encanta escuchar un sinnúmero de respuestas, que no necesariamente se adecuan a la realidad. Desde petróleo, industrias ultra desarrolladas, historia, poder económico, etc. ¿Pero cuál es la verdadera respuesta?

La verdadera respuesta, y que no siempre consigo escucharla en los talleres, es que todos los países desarrollados tienen tren, para pasajeros y mercaderías.

La realidad del SXXI es tan fantástica y favorable para los charrúas que hasta me asombra. ¿Se acuerdan cuándo llegó McDonalds a Uruguay? Es una pregunta con trampa ya, porque si se acuerdan, seguramente tienen poco más de 35 años (chicas pueden decirme que no se acuerdan).

Bueno, ¿a qué quiero llegar con lo de McDonlads? Sencillamente a lo que significa recibir un servicio rápido; a cuál es el alcance de cambiar todo un modelo de negocio de la noche a la mañana.

Hoy en día son muchos los lugares donde uno puede pagar y enseguida recibir la comida. Hace tan solo 40 años, esto no era para nada obvio. Todos estábamos acostumbrados a sentarnos a la mesa, esperar al mozo y hacer nuestro pedido.

La cadena de valor fue totalmente cambiada, al hacer que nosotros -los clientes- seamos quienes realicemos el trabajo de tomar nuestro popio pedido, llevarnos la comida a la mesa y luego desechar los residuos. ¿Trabajar gratis para el restaurante al que le íbamos a comprar? Parecía imposible, pero hoy es parte del paisaje urbano de casi cualquier país del planeta. ¡Y no nos llevó tanto tiempo acostumbrarnos!

¿Cuál es la realidad de este hermoso país totalmente centralizado en Montevideo? ¿Qué pasa con los negocios, industrias y personas que hasta hace muy poco estaban desconectadas de la vida educativa y empresarial global? ¿Qué pasa con los modelos de negocio, los productos y los mercados a los que podemos apostar?

Llegó el tren bala a Uruguay. Y llegó para quedarse. El tren bala es Internet; esa maravillosa tecnología que nos permite -en instantes- no solo estar conectados, sino -también- relacionarnos, estudiar, aprender, crecer, comprar y vender; probar, comentar y recomendar cosas en segundos.

Sí. Llamo tren bala a Internet, ya que en segundos -y gracias a ella- puedo llegarle a todos los potenciales clientes, no solo en Paysandú, sino también en Montevideo y el resto del mundo.

Hace pocos días, una empresa a la que apoyo hizo un muy pequeño cambio en su forma de hacer negocios. El resultado fue asombroso. Prácticamente de la noche a la mañana aumentó la cantidad de producción y ventas. La dueña me comentaba que esto de vender a través del mail es fantástico, y no entiende cómo le llevó tanto tiempo hacer ese cambio.

Debemos acostumbrarnos no solo a los cambios tecnológicos y sus complejidades, sino también adaptarnos a la realidad de un interior cada vez más cerca. Un interior que hoy está en mi escritorio mientras escribo este artículo para Sanduceros.

Las posibilidades son infinitas. Y lo mejor de todo es que la mayoría de esas posibilidades tienen una solución gratuita o accesible para todos los bolsillos.

El tren bala llegó a Uruguay y se quedará por mucho tiempo. Tiene vías virtuales, estaciones virtuales, clientes virtuales y relaciones virtuales; pero que son tan verdaderas y útiles como las reales. Los clientes son los mismos que los que entran a nuestro negocio.

Simplemente los formatos de relacionamiento humano han cambiado tanto, que ya no dependemos de la infraestructura de trenes de verdad. Aunque, a decir verdad, sería fantástico que pronto se renueve el tren en Uruguay y se nos conecte físicamente por esa vía.

Estamos simplemente a la distancia de un solo click. Lo que parecía imposible hace tan solo 20 años, hoy en día es súper sencillo y fácil. Tanto que asusta, inspira, desafía, impacta, empuja, acerca, libera, beneficia, fomenta, enriquece, diferencia, etc.

Pero los que ven aquí una oportunidad, la aprovechan. Por ejemplo, esa migración de talentos hacia las ciudades capitales está cambiando. Muchos de esos jóvenes, que hasta hace muy poco no tenían más remedio que quedarse en la gran ciudad para crecer profesionalmente, hoy pueden libremente decidir donde estar físicamente. Eso sucede porque virtualmente estamos en todos lados.

¿Y qué pasa con aquellos negocios que no podían crecer por tener un universo de clientes totalmente acotado? Exactamente lo mismo. Ahora tenemos a los clientes a un click de distancia, y justamente lo único que debemos pensar es el medio por el cual el producto o servicio llega al consumidor final. Y ya existen los proveedores logísticos necesarios para que todo Paysandú esté en mi escritorio.

Sanduceros, en una semana nos vemos en Paysandú. En una semana los ayudaré a romper los paradigmas que no les permiten ver más allá de las realidades, y aniquilar las rutinas a las cuales estamos acostumbrados. En una semana reanalizaremos nuestros productos y servicios.

¿Y luego qué? Manos a la obra; con el apoyo de instituciones, colegas, profesionales globales, y obviamente del tren bala, para dar el valor agregado que nos diferencie.

¡Hoy en día llegar es posible!

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Daniel Goldman es CEO de Innmentor. Experto en desarrollo, gestión y mentoría de la Innovación, Facilitador de la Metodología SIT – Systematic Inventive Thinking, con experiencia en educación no formal, Coaching Profesional y Coach de vida basado en Inteligencia emocional. Experto en aplicación de Teoría del Juego y Caos para empresas.

Docente invitado en las Univ. Tel Aviv. Univ. Ben Gurion, Hadassa Academic College y Hebrew University, en las áreas de Administración de Empresas, Mercadeo y Matemáticas.

Estudió en la Universidad Hebrea de Jerusalem, Math Theory con especialización en Teoría del Juego y Algoritmos. 

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